Este blog está discontinuado

Hola. Este blog ya no se actualiza. Pero me pareció bien que todo este material siguiera estando ahí. Por si alguna vez alguien quiere leerlo, y por contribuir a la basura informática.
Puedes ver y leer lo que hago y escribo ahora en instagram,
en facebook, en twitter...

24.8.04

Prohibido prohibir.

me ha tocado este mes de agosto ponerme al día al respecto de una entelequia acerca de la cual empezaremos a oir hablar con insistencia, sospecho: los derechos culturales. Coincidiendo con los diálogos que en el Fórum trataban el tema, y de la mano de la AECI, el admirado Chaves y mi señorito han comisariado para el fasto barcelonés (con itinerancia posterior) una exposición deliciosa de reflexiones gráficas de ilustradores y diseñadores sobre el tema. De la muestra concluyo que el asunto está difuso y que hay que concretar y debatir muchísimo, y al tiempo me demuestra también que esa ambigüedad (nebulosa, diría) ha resultado en unas soluciones gráficas mucho más interesantes que lo que acostumbramos a ver en convocatorias así, donde el tópico, lo recurrente y repetitivo suele ser dominante. Especialmente, sin desmerecer del resto, me quedo con propuestas como la de Rubén Fontana, la de Eric Olivares, la de Hoa Melgar, la de Lalo Quintana o la de Hermenegildo Sábat, que me reconcilian aunque sea por lo parcial con esta fiebre institucional de recurrir a los grafistas para este tipo de colectivas voluntariosas e irrelevantes, siendo sin embargo incapaces de incorporarlos (a los grafistas) a sus estrategias en el mundo real cuando afrontan este tipo de problemas.
Y ya más concretamente, algunos apuntes respecto a los derechos culturales: cuando le pregunto, por lo privado, a Chaves me cuenta con esa ironía genial suya que “el tema está muy verde y hay mucho por hacer, casi hay que empezar por explicarle a la gente que no se trata del derecho que supuestamente tendrían los artistas mediocres a recibir subvenciones y ayudas” (no es textual). Y no puedo evitar acordarme que, como ya hiciera en la CAM , al llegar a la alcaldía Gallardón ha eliminado de su mapa la concejalía de Cultura en favor de la de las Artes, con lo que Madrid ya es una ciudad y comunidad sin cultura, aunque eso sí, puestos están los mimbres para esa concepción tan cortesana, condescendiente y antojadiza del arte y de los artistas como interesados bufones de lo establecido que tanto gusta a Gallardón y a los suyos. Y por mi parte, yo sigo en mis trece: aunque la literatura pueda ser arte, la cultura está en la lectura.
Y más: mientras escribo esto hay dos periodistas retenidos por el islamismo extremo y con amenaza de ser ejecutados si no se deroga la reciente ley que prohibe cualquier simbolo externo de las religiones en las escuelas francesas. Y una no puede sino pensar en esos vientos sembrados, y recordar el fantástico cartel de Sábat para esa exposición: “prohibido prohibir”.
(de Pseudonimma)
Álvaro Sobrino. Diseñador gráfico, periodista y editor.
Mantiene una columna en la revista VISUAL, con el nombre de Crónicas de Pseudonimma, donde recoge opiniones de otros y las suyas propias acerca de la actualidad del diseño español.