Este blog está discontinuado

Hola. Este blog ya no se actualiza. Pero me pareció bien que todo este material siguiera estando ahí. Por si alguna vez alguien quiere leerlo, y por contribuir a la basura informática.
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27.3.12

A READ no le preocupa el problema, sino "la polémica" que pueda generar el problema

55 días ha tardado la red española de asociaciones de diseño READ en posicionarse respecto al concurso para la identidad de la candidatura olímpica de Madrid 2020.
En abstracto, una Federación de Asociaciones no es una mala idea. A lo largo de las dos últimas décadas se ha intentado en varias ocasiones. Muchas veces instigados por el difunto Ddi, que tenía la obsesión de que hubiera un interlocutor único. "Un ministro no va a recibir a quince asociaciones por separado", solían decir. El problema es que ellos estaban muy interesados, convocaban las reuniones... pero a la hora de la verdad, no ponían la pasta. Y para que eso funcionara, hacía falta pasta, y las asociaciones no la tenían y siguen sin tenerla.
Personalmente no creo mucho ni en la necesidad ni en la viabilidad. Me atrae mucho más la fórmula del FAD –quizá porque la vivo muy cerca– donde cinco asociaciones multidisciplinares –arquitectos, industriales, gráficos, artistas y artesanos, y moda– comparten recursos comunes, espacios, y del roce surge el cariño y del cariño la transversalidad, maldito palabro, con beneficios tangibles. Y con ello, la proyección pública del diseño sin etiquetas es mayor.
Si para algo ha de servir una asociación de asociaciones es para transmitir a la sociedad mensajes claros y contundentes cuando hace falta, para lo que de manera individual y por separado no tienen ni recursos ni potencial mediático. Y el concurso del identificativo de Madrid2020 era una oportunidad excelente. Para hacerlo y para que READ estuviera por fin en el mapa.
Si en un par de semanas ocho asociaciones fueron capaces de emitir un comunicado conjunto con bastante repercusión, READ ha tardado cinco más en conseguir consensuar el suyo. Podrían haberse sumado al primer comunicado –se intentó– pero la oposición de la asociación madrileña lo hizo imposible. Mientras en redes sociales y mentideros a Dimad se le venía exigiendo que hiciese pública su posición, al fin y al cabo se trataba de la candidatura de su ciudad, ellos preferían dejar pasar el tiempo y eludir tener que afear la conducta a su Ayuntamiento. Al final, lo más parecido a una toma de postura sería este tibio comunicado, que evita posicionarse para matar al mensajero. Mejor hubiera sido que no se hubiera producido, de él solo pueden extraerse algunas conclusiones:
Que READ es un muerto antes de nacer. Algunas asociaciones tendrán que explicar, si quieren, la incongruencia de apoyar dos manifiestos tan distantes y casi contradictorios.
Que las asociaciones de READ prefieren extenderse sobre asuntos ya ampliamente tratados sin aportar nada nuevo, con tal de no molestar a los políticos (o a las asociaciones que no quieren que se moleste a los políticos).
Que ha sido tanto el celo por no molestar en el redactado, que si nos atenemos a la literalidad del texto, es simplemente escandaloso. Este es el único párrafo en el que se alude a la identidad de la candidatura olímpica:
La READ quiere manifestar su preocupación por la polémica surgida en torno al logotipo para la Candidatura de Madrid como Ciudad Aspirante para los Juegos Olímpicos de 2020 y expresar su profundo malestar por el daño que está ocasionando a la comunidad de diseñadores.
Desde la experiencia profesional, las asociaciones de diseñadores pensamos que la polémica no beneficia a la candidatura olímpica de Madrid ni a la imagen del diseño de nuestro país.
De este parrafo sólo puede deducirse:
Que lo que preocupa no son los hechos en sí, sino la "polémica surgida" alrededor de esos hechos. Extraña y política manera de verlo: no importa que esté mal mientras que no se enteren los medios y no se genere polémica. Esta actitud, muy propia de los políticos, es inaceptable en los responsables de las asociaciones.
Que READ dé por válido que esta polémica genera un daño a la comunidad de diseñadores es preocupante. E incongruente si tenemos en cuenta que de las cinco asociaciones de READ, tres firmaron el comunicado que supuestamente encendió esa polémica.

En ningún caso se especula con la posibilidad de que el error haya estado en el proceso ni que el resultado sea malo, la culpa es de "la polémica" y de quienes la suscitan.
Ciertamente, es infumable. A nadie escapa las ganas que había dentro de READ de poder firmar algo conjunto para que se sepa que existen. Pero se ha cedido mucho a quien no quiso ponerse a tiro antes, en el comunicado que sí firmaron ocho asociaciones sin necesidad de paraguas. Tanto, que quien queda en entredicho ahora es READ.

Entretanto, la polémica ha amainado como sucede siempre. READ queda tocado, quienes sólo querían valorizar su silencio parece que lo consiguen y la vida sigue. Y esta vez sí, el daño colateral vuelve a ser el diseño madrileño. Pero no pasa nada, nos gastamos la pasta en promocionar el diseño francés aquí y se nos olvida enseguida.




12.3.12

Con la privatización del ISBN, los autores-editores y los pequeños editores le van a pagar la fiesta a los grandes editores

Ya hablamos en su día de la privatización del servicio del ISBN, y del despropósito que suponía dejarlo en manos de la Federación de Gremios de Editores FGEE. Lo que era un servicio gratuito ahora es de pago, pero además lo es para unos mucho más que para otros. La Federación representa los intereses de los grandes editores, pero como suele suceder, se arroga la voz de todos cuando hay que sacarle algo a los políticos.

Los medios empiezan a hacerse tímidamente eco del malestar que la gestión del ISBN está suponiendo. Podíamos leerlo hace unos días en este artículo de El País, donde Valentín Pérez (Minobitia) y Amalia López (Sinerrata) exponen valientemente cómo todo parece orquestado para beneficio de las editoriales grandes y en perjuicio de las pequeñas.

No existiendo cifras a las que agarrarse –la Federación las utiliza siempre a su antojo, sin acabar de ofrecerlas u ofreciéndolas tergiversadas, llegando a veces al ridículo– se me ha ocurrido hacer lo que viene llamándose una "simulación", esto es, unas cifras basadas en datos que no poseemos pero que podían ser ciertos. Antes de llamarme mentiroso, bien podrían los responsables ofrecer las cifras reales, por ejemplo del primer trimestre del año. Y así yo rectificaba, me tragaba este post y ellos quedaban fetén.

Para ello, tenemos que partir de las cifras de los ISBN asignados en 2010 a edición de carácter privado, que son las últimas que se conocen. Las he sacado del informe Panorámica de la Edición Española de Libros 2010, editado por el Ministerio de Cultura.


Autores-editores: En 2010, se les asignaron 8.730 (7,6%) números. Entonces era gratuito, pero aplicando las tarifas actuales (45€) hubieran supuesto 392.850€.

Editoriales pequeñas: son aquellas que editan menos de cien libros al año, 26.337 (23%). Dependiendo del paquete a que se acojan, el precio está en 9,5€ o 5,5€. No habiendo datos, digamos que la mitad a cada uno, lo que supondría 197.526€.


Editoriales medianas: entre cien y mil libros anuales. En 2010 se les asignaron 36.735 números (32,1%). Ellos pagan 5,5€ o 3,5€. Mediando como en el caso anterior, supondría 165.305€.

Editoriales grandes: más de mil libros anuales. Les fueron asignados 33.453 números (29,2%). Estos pagan entre 3,5€ y 2,6€. Lo que supondría, siempre haciendo media al cincuenta por ciento, 102.031€.

Dando por buenas estas cifras (que no lo son), cabe deducir:

Que, si según reza en el encabezado de las tarifas, "los servicios de la Agencia son de pago, con el único propósito de cubrir los gastos de funcionamiento de la propia Agencia", los autores-editores, que editan sólo el 7,6%, estarían sufragando el 45,8%.

Y cabe deducir también que, entre los autores-editores y los pequeños editores –aquellos que editan menos de 100 títulos al año–, aunque suponen solo el 30,6% de lo editado, costean casi el 70% (el 68,83%, concretamente).


Ya he comentado que estas cifras no son las buenas, pero no sólo porque la falta de datos escrupulosamente ciertos pueda suponer una variable, sino sobretodo porque las editoriales pudieron hacer acopio de números de ISBN asignados por adelantado cuando no había que pagar por ellos, y lo hicieron. Y durante bastante tiempo los usarán, tiempo en el que sólo los microeditores y autores editores pasarán por caja.

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Dato importante: la suma de las cuatro tipologías es el 92%. Se ha obviado el 8% restante que corresponde a la edición de las Administraciones Públicas.


1.3.12

insumisión cultural

Seguro que has oído hablar al ministro de cultura –y a su antecesora– de las "descargas ilegales", cuando en nuestro país, lo dice la ley y lo ratifican las sentencias, las descargas no son ilegales. La criminalización de los enlaces a contenidos y las descargas ha sido una constante, y detrás de ello se consigue crear incertidumbre. Cuando la incertidumbre se refiere a consecuencias penales, se convierte en miedo. Y el miedo es la herramienta para la sumisión.

Así, hace un año en este post me autoinculpé por el uso de contenidos sometidos a copyright. Ahora toca dar un paso más, y para ello me he sumado a la iniciativa de la gente de Hacktivistas, “Wert de enlaces“. En este momento, son ya más de 300 las páginas de todo tipo en las que es posible encontrar el enlace para descargar el archivo sujeto a derechos de autor. Con ello, queda resuelta la situación legal de este blog: aunque no está claro que vulnere la ley (de demostrarlo se trata) esta página será denunciada ante la "Comisión" por el creador del archivo.

¿Qué es Wert de enlaces?
Se ha elegido una obra con Copyright© de un socio de la SGAE. Animamos a todas a que participen en esta acción: consiste en enlazar o usar su obra sin su permiso y acceder a ser denunciadas por el creador ante la comisión del Ministerio de Cultura encargada sin proceso judicial de tramitar las denuncias de la llamada Ley Sinde-Wert. A partir del 1 de marzo (día en el que entra en vigor la aplicación de dicha ley) el autor, seguramente molesto en algún momento, nos presentará una denuncia a todas las páginas que hemos enlazado su obra.
Como verás, en la página hay un listado de webs que se han agregado a esta iniciativa, que en resumen, lo que hace es enlazar contenido a una obra de un autor socio de la SGAE sin permiso.

Como ha escrito David Bravo:
"La industria del copyright movió un dedo y se enviaron cartas advirtiendo de acciones legales. Cuando las cartas se ignoraron, la industria movió un dedo y se interpusieron las acciones judiciales. Cuando los jueces resolvieron en favor de denunciados y demandados, la industria movió un dedo y se recurrieron las resoluciones. Cuando volvieron a perder en los juzgados, la industria movió un dedo y desaparecieron los jueces".

Si deseas bajarte el contenido, este es el enlace:
labioswert Bájame
Álvaro Sobrino. Diseñador gráfico, periodista y editor.
Mantiene una columna en la revista VISUAL, con el nombre de Crónicas de Pseudonimma, donde recoge opiniones de otros y las suyas propias acerca de la actualidad del diseño español.